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Doce meses después de la catástrofe sigue habiendo muchas dudas sobre los acontecimientos en Valencia, tanto antes, durante como después de la riada, especialmente sobre el número de víctimas. ¿Cuántas fueron las personas que murieron el 29-O y los días inmediatos por falta de asistencia?
23 de octubre de 2025, Valencia. – Los vecinos entre Paiporta y Catarroja lo deducen desde el primer día: la cantidad de muertos por la riada del 29 de octubre de 2024 en la provincia de Valencia es mayor de los 229 oficiales. Las denuncias vienen de vecinas y vecinos afectados. Los que vieron la corriente subir con violencia. Los que escucharon los gritos de socorro. Los que vieron los cadáveres flotar. Son testimonios de los voluntarios que llegaron caminando kilómetros cuando los cuerpos de seguridad pública todavía esperaban las órdenes de los responsables. Horas y días.
El 1 de noviembre de 2024, tres días después de la riada, RTVE hablaba de más de 200 víctimas sólo en la provincia de Valencia; un número confirmado por el Centro de Coordinación de Emergencias (Cecopi), refiriéndose a informaciones de la Guardia Civil. Registraron 200 fallecidos y “70 cuerpos localizados de los cuales aún no se ha producido el levantamiento oficial”.
El número de desaparecidos ese día llegaba a 1.900, aunque el Cecopi insistía en que era un número provisional.
Un día antes se activó el Centro de Integración de Datos (CID), un organismo del Estado que se constituye en caso de muertes múltiples para que haya una sola fuente de información. El primer comunicado lo emite el domingo 3 de noviembre de 2024 por la noche, en el que habla del “levantamiento de 188 cadáveres”.
Para no olvidar el abandono de los organismos públicos en los días posteriores a la riada: imagen del 31 de octubre de 2024, que muestra el impacto del agua y el barro en Benetússer. – Foto: Adriana López.
A partir de ese día ya no se habla del número de muertos sino del número de “autopsias a fallecidos” y del número de “identificados”, que son 183 y 67 respectivamente. Sobre los desaparecidos se manifiesta el CID recién el 5 de noviembre de 2024, una semana después de la catástrofe. Y hay dos frases claves en el comunicado sobre las 89 desapariciones vigentes ese dia:
“Esos casos activos corresponden exclusivamente a las denuncias donde los familiares han aportado diferentes datos y facilitado muestras biológicas que permitan la identificación posterior de sus familiares.”
“Es importante hacer constar que las denuncias de desaparecidos con expediente activo en las oficinas ante mortem no equivalen al número total de desaparecidos que podría haber generado la tragedia, pues puede haber casos de desaparición que no se hayan denunciado todavía.”
Para asegurarnos de que no ha habido denuncias sin entrega de requisitos como huellas dactilares, pruebas de ADN o fotos -para muchas personas en la zona cero imposible de conseguir, porque perdieron todo-, preguntábamos lo siguiente al Instituto de Medicina Legal de Valencia (IML) como ente responsable por las autopsias de las personas fallecidas y fuente para las comunicaciones del CID:
Según datos oficiales, a principios de noviembre de 2024 se mantenía activo los expedientes “ante mortem” de personas desaparecidas, donde los familiares han aportado datos y facilitado muestras biológicas en las oficinas policiales que permitían la identificación posterior de la persona. ¿Qué pasó con las denuncias de desaparición de personas que no podían aportar estos datos? Y de cuantas personas hablamos?
Hasta el día de hoy no respondieron, igual que a varias otras preguntas que les hemos mandado.
Nuestra búsqueda como periodistas para conseguir declaraciones de personas involucradas en el levantamiento, reconocimiento y en la preparación de fallecidos, que nos puedan contar de primera mano lo que pasó en los días posteriores a la riada, fue casi imposible. Los de la Unidad Militar de Emergencia (UME) se acogieron al secreto militar, los forenses al secreto judicial; y los bomberos consultados retiraron su oferta de hablar a última hora.
Por lo tanto, desde mutantia.ch no conseguimos conversar con estas fuentes directas. Sí pudimos hablar con testigos oculares de la calle, como María José García. Ella es una de las dos mujeres que vieron salir camiones frigoríficos del Centro Comercial Bonaire en la noche del 5 de noviembre de 2024 y lo documentaron por vídeo.
Oficialmente no hubo muertos en Bonaire; eso afirmó el director de la policía Nacional el 5 de noviembre de 2024. Pero María José García no fue la única persona que confirmó la presencia de camiones frigoríficos que circularon por la noche y sin matrícula alrededor del Centro Comercial de Aldaia. También lo contó un gruista de Madrid, cuyos compañeros estaban sacando coches en el lugar. Dio su testimonio el 7 de noviembre de 2024 a Olga Jimenez, voluntaria de la Capital, que al regresar de Valencia se le dañó el coche:
Los grandes medios de comunicación armaron una campaña en “contra de los bulos” -y el de Bonaire supuestamente fue uno de los más grandes. Pero en ningún momento había un representante del Centro Comercial que hubiese explicado la presencia de dichos trailers, contrastando los “bulos”. Ni tampoco un diario, una radio o una tele que realmente indagara el origen de estos trailers y las razones por las cuales entraron de noche a Bonaire. ¿Por qué no?
Mientras tanto en la Zona Cero se forma un equipo diverso de vecinas afectadas, investigadores y voluntarios de diferentes partes de Valencia y de España, para cuestionar las versiones oficiales de los hechos. Y comunican sus primeras dudas el 21 de febrero de 2025 en el primer volumen del Periodico del Pueblo. Es una edición con muchas preguntas, una de ellas es:
“Por qué se sigue diciendo que no hubo víctimas en Bonaire, cuando sabemos por diversas fuentes y testimonios que hubo mínimo 7 fallecidos?”
La fuente principal, en este caso, es un buceador de la UME. Así lo revela Carlos Soler, un joven valenciano, integrante del Periódico del Pueblo. El buceador le llamó a él, después de haberlo visto en diferentes programas de televisión, donde denunció como voluntario la negligencia de los organismos públicos. Carlos Soler vio los acontecimientos en la Zona Cero de primera mano, ya que estuvo ayudando en la búsqueda de desaparecidos en el barranco de Poyo. “El buceador me dijo que sacó siete cuerpos de Bonaire.”
Carlos Soler es una de las pocas personas, que afirmó públicamente con su nombre y apellido, que durante la catástrofe ha habido mucho más muertos que las cifras oficiales. Lo decía también durante el homenaje a las víctimas el 29 de mayo de 2025, frente al municipio de Catarroja:
“Desde el tercer día sabía que había más de mil muertos. Y es algo que me pesa mucho en el alma. Y me pesa porque lo sé a ciencia cierta. Conozco gente que estaba en la morgue trabajando. Nunca van a confesar, nunca van a testificar, pero los forenses saben todo.”
Vale recordar que durante varios días había más de 100 forenses de todo el país, realizando autopsias e identificando víctimas. Para poder entender el por qué tantos profesionales, preguntamos al IML lo siguiente:
En el contexto de la riada del 29-O en Valencia, ¿cuánto tiempo promedio necesitó un equipo forense para la autopsia de un cuerpo?
Pero el Instituto tampoco respondió a esta pregunta.
Por cada persona fallecida en la riada se tiene que abrir un expediente judicial: montañas de coches destruidos entre Benetússer y Alfafar, 31 de octubre de 2024. – Foto: Adriana López
El proceso legal que lleva adelante el juzgado de Catarroja, sigue en su fase de instrucción. Por la complejidad y extensión de la causa ya se admitió la prórroga por seis meses. “Y posiblemente vamos a pedir seis meses más”, dice Gonzalo Leon, representante legal de la Asociación de Damnificados de Horta Sud. “Preferimos una instrucción lenta y que mueva todos los requisitos para conocer la verdad.”
La querella de la asociación se dirige a la imputación de varios funcionarios por presunta responsabilidad penal, quiere decir, por homicidio imprudente, lesiones imprudentes, daños imprudentes, prevaricación (omisiva) y omisión del deber de socorro. Pero hasta ahora sólo se admitió la querella contra Salome Pradas como ex-consejera del Interior y Emilio Argüeso, ex-secretario autonómico de seguridad y emergencia (AVSRE).
En cambio, tanto la querella como la posterior apelación por parte de la asociación en contra de Alberto Javier Martín (director general de Emergencias), Jorge Suárez (subdirector de AVSRE), Inmaculada Piles (jefa del servicio de Emergencias) y Miguel Polo (presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar) fueron rechazadas. En relación al número de fallecidos Gonzalo León no duda del número oficial. “No creo que haya más fallecidos de los que aparecen, porque es un procedimiento muy mediático y cualquier familiar que estuviese desaparecido no tiene problemas de informar al juzgado de esa desaparición.”
Preguntando por el origen de los 224 nombres de las personas fallecidas que figuran en el auto del juzgado del 10 de marzo de 2025, el abogado del bufete Vilche en Madrid, lo explica de la siguiente manera:
“Cuando muere una persona en circunstancias como la de una riada se tiene que ordenar el levantamiento de los cadáveres. Para eso va un juez que ordena el levantamiento, independientemente si los familiares presentan una denuncia o que luego ese fallecido forme parte de un escrito de un procedimiento judicial. Entonces, los fallecidos en el auto del 10 de marzo de 2025 proceden de eso: de denuncias de familiares, de escritos de abogados o de levantamientos de cadáveres, ordenado por un juez.”
Voces y testimonios de que ha habido más muertos que los 229 oficiales hay muchos, pruebas escritas pocas. Pero tampoco se sabe de dónde el CID sacó la cifra de 229, cuando oficialmente constan 224 nombres …
Carlos Soler, que habló con personas que trabajaban en la Feria de Valencia, que se tuvo que abrir después del colapso de la Ciudad de Justicia por la gran cantidad de fallecidos, dice que sus fuentes han sido amenazados si es que hablan. “Tenían que firmar un papel, donde se comprometían a no revelar nada de lo que habían visto.” A la vez, asociaciones de víctimas afirman que muchos de los familiares ya no quieren hablar del tema, porque están cansados, porque no quieren volver al dolor.
Además, está la ley de protección de datos del año 2018, que impide la revelación de nombres; de hecho, hay asociaciones que denuncian que debido a esta ley, no se puede tener claridad sobre la cantidad y los nombres de las víctimas. La legislación española prevé sanciones drásticas contra personas que infrinjan esta ley. Según la gravedad, con multas de miles a millones de euros o incluso con prisión hasta cuatro años.
Texto: Romano Paganini
Foto principal: El canal que salvó a la Capital, pero no a los pueblos del sur: El río Turia a la altura del Puente de la Solidaridad, por el que llegaron miles de voluntarios durante los primeros días después de la riada, 4 de abril de 2025. – Foto: Romano Paganini
Edición y producción: Gabriela Novoa & Romano Paganini
Redes Digitales: Belen Mendoza & Marcos Marquez
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