Contra pesticidas: pueblo en los Alpes con respaldo internacional

Los pobladores de Malles en el norte de Italia prohibieron el uso de pesticidas sintéticos.
Cinco años después del referéndum se sigue fumigando. Y eso a pesar de estudios
preocupantes respecto a los pesticidas. Reportaje desde un lugar donde los ciudadanos
luchan para que se cumpla con la decisión en la Consulta Popular.

24 de julio 2019, Malles, Italia. – Gerhard Tarmann sube rápido la colina hasta la iglesia San Veith, sus 68 años no se le notan. Ha viajado por todas partes del mundo para investigar mariposas, pero el Vinschgau en el Tirol el Sur, un valle angosto del norte de Italia, en la triple frontera con Austria y Suiza, es su lugar predilecto: lo conoce como a ningún otro. Desde hace medio siglo Tarmann investiga acá su especie favorita, los pequeños carneros (cygaenids), polillas de actividad diurna pertenecientes a la familia de las mariposas venenosas: los mira y los cuenta, los observa y los registra.

Entre 2014 – año del referéndum contra los pesticidas en Malles (detalles en el box: Contexto) – y 2018, el zoólogo comprobó la situación de estos “instrumentos de medición voladores”, ya que los carneros son muy sensibles a la contaminación atmosférica. Y los pesticidas son parte de esta contaminación. Tarmann combinó los resultados de los últimos cuatro años con sus observaciones que ha venido haciendo desde 1972, creando un informe científico de largo plazo, único en Europa. De este informe el Municipio obtuvo una conclusión importante: a excepción de Malles, en Europa Central ha disminuido la diversidad de mariposas.“Con 16 diferentes especies, Malles es uno de los centros más importantes de los Alpes para las mariposas”, cuenta Tarmann,
Entonces, ¿todo bien? Lamentablemente no.

 

CONTEXTO
En 2014 se llevó a cabo un referéndum para prohibir los pesticidas sintéticos en Malles (Mals). El municipio de 5’000 habitantes es el último lugar del valle Tirol del Sur, al norte de Italia, donde la industria agrícola, sobre todo la fruti- y viticultura, ha avanzado en los últimos años. Con sus fumigaciones de pesticidas sintéticas ha afectado la salud de los habitantes y de su buen vivir.
Después del referéndum, donde participó casi el 70 por ciento de los habitantes y donde 76 por ciento dijeron que Si a la vida y No a las fumigaciones, luego se elaboró una Ordenanza Municipal. En esta se prohibió el uso de productos fitosanitarios clasificados como muy tóxicos y tóxicos en todo el municipio. El resto de las fumigaciones solo están permitidas a un mínimo de 50 metros de distancia de los jardines infantiles y terrenos escolares, instalaciones sanitarias y de atención, parques y jardines públicos, así como zonas deportivas y recreativas, carreteras, carriles para bicicletas, senderos para excursionistas, cementerios, edificios públicos y privados y zonas con animales. Por la infraestructura apretada de Malles se puede hablar de una prohibición completa de los químicos de la agroindustria.
Además el municipio tiene que promover la compra y el consumo de los productos que sean producidos de forma agroecológica u orgánica, por ejemplo para la alimentación en los comedores. (rpg)
CONTEXTO

Aquí, en el Tartscher Bichl, cuyo vientre durante la Segunda Guerra Mundial fue vaciado por las tropas de Mussolini, porque tenían planeado instalar un depósito de armas y soldados, aquí, donde ya en el año 400 antes de Cristo se encontraba un majestuoso asentamiento rético, Gerhard Tarmann explica lo que está ocurriendo. En realidad, la colina ha sido el hábitat perfecto para los carneros desde tiempos pasados. Y las mariposas menos sensibles también se encuentran hoy en día en esta zona.

Sin embargo, hay una pérdida de carneros que para él es una señal de que el hotspot Malles está enfermo. En las laderas inferiores, apenas un kilómetro al norte del Tartscher Bichl, se encuentra con el mismo fenómeno: el hábitat en sí mismo sería perfecto, pero las polillas sólo pueden avizorarse varios metros más arriba. Los monocultivos y los pesticidas son unas de las causas de la disminución de los carneros, dice Tarmann.

“Este heno pertenece a los residuos tóxicos”

Los agricultores orgánicos de la región confían en las habilidades de estos expertos en diagnósticos de la contaminación del aire. Ellos conocen bien los problemas con la deriva de los pesticidas. El hecho de que el Captan -un fungicida utilizado tanto en la fruti como en la viticultura- se encuentre en el heno orgánico, no es nada nuevo: ha sucedido una y otras veces. Ya en 2011, la toxicóloga Irene Witte, que analizó muestras de heno orgánico en el Vinschgau, expresó su preocupación: “Este heno pertenece a los residuos tóxicos”, dijo la científica que investiga los efectos combinados de los pesticidas desde finales de la década de 1970.
El área de los llamados cócteles, de los cuales se ha investigado poco y nada, debería ser el centro de atención, pues ellos pueden llegar a ser particularmente peligrosos, tanto para la salud humana como para la de las abejas. A estas, por ejemplo, la sustancia Tiacloprid -un insecticida perteneciente a la clase de los neonicotinoides- les causaría mucho menos daño si fuese aplicada aisladamente. En cambio, si se combina con el fungicida Propiconazol, se convierte incluso en una sustancia más nociva que el neonicotinoide Imacloprid, prohibido por la Unión Europea para los cultivos herbáceos.

Fumigando las “malas yerbas” desde una camioneta del municipio (agosto 2016): La prohibición de los agrotóxicos en el municipio de Malles, Italia, esta frenado por una intervención de los campesinos convencionales.  (mutantia) 


La problemática en el Tirol del Sur es evidente. Entre febrero y agosto de 2018 el Instituto de Medio Ambiente de Múnich, Alemania midió el aire en cuatro diferentes lugares del valle, en total 72 veces. Pero únicamente durante 21 días -del 23 de febrero al 16 de marzo- no se registró ningún pesticida; en los demás días sí. Pero eso no fue todo: “seis sustancias activas hemos encontrado en un valle lateral a más de 1.600 metros sobre el nivel del mar y a varios kilómetros de las plantaciones más cercanas”, explica el responsable Karl Bär. “Según los informes de las autoridades de la Unión Europea, esto no debería ser posible”. Dicen ellas que cuatro de esas sustancias se liberan al aire sólo en cantidades insignificantes y se descomponen rápidamente. “Esta evaluación, obviamente, no puede ser correcta”, dice Bär.

Campesinos orgánicos no son considerados 

El Consejal Provincial de Turismo y Agricultura, Arnold Schuler, también mostró interés en el estudio. Y aunque aún no conocía los resultados del estudio, el periódico más grande de la región Tirol del Sur-Trentino publicó una larga entrevista con él, justo el día de la conferencia de prensa. El título: Concejal con rabia. Juego con miedos y daños para el Tirol del Sur.

Schuler, fruticultor y defensor de los pesticidas sintéticos, al parecer ya se había formado su opinión respecto a las mediciones del aire. Y eso a pesar de que Tirol del Sur-Trentino es una de las regiones de Italia donde los pesticidas se rocían con mayor frecuencia por hectárea. El Concejal afirma repetidamente que no es posible hablar de daños de la salud y que los valores medidos están muy por debajo de los valores límites legalmente permitidos.

Casi ningún estudio sobre pesticidas ha persuadido a los responsables dentro de la Asociación de Agricultores de Tirol (Bauernbund) y del poder político. Al contrario: antes de dar inicio a un programa de radio con el alcalde de Malles –desde un principio a favor del referéndum- y solo a pocos días después de que se publicaron los datos sobre la contaminación del aire, el director de la Asociación de los Agricultores envió un SMS a los miembros y les pidió que participaran en el programa: “El programa es una excelente oportunidad para mostrar al público la perspectiva de los agricultores y para refutar la información falsa”. El hecho de que existan numerosos agricultores orgánicos entre los miembros de la Asociación parece haber sido olvidado.

 

Pesticidas en los patios de juego

Y como si eso fuese poco a inicio de mayo un equipo de científicos presentó otro estudio preocupante: 71 diferentes patios de juego en el Tirol del Sur fueron sometidos a pruebas para un total de 315 pesticidas. No hay ningún otro estudio comparable en todo el mundo. Y además el equipo de Caroline Linhart del Instituto farmacéutico de la Universidad de Innsbruck, Austria, incluyó las condiciones meteorológicas. De este modo, proporcionó datos ilustrativos sobre el transporte de las sustancias activas en función de las condiciones meteorológicas. Los resultados fueron abrumadores: el 92 por ciento de todos los pesticidas que se encuentran allí se consideran hormonalmente activos. Es precisamente por estos pesticidas que ya no se aplica aquel principio de que “la dosis hace al veneno”.

Koen Hertoge es uno de los coautores del estudio sobre los patios de juego. “Normalmente”, dice el belga de 44 años que se radicó en Malles, “estos estudios pueden costar hasta 70.000 euros, dinero que, por supuesto, no tenemos. Pero con una enorme cantidad de trabajo voluntario, lo hemos logrado”.


Hertoge co-fundó PAN, Pesticide Action Network, en Italia. Hoy es miembro de la junta directiva de PAN-Europa y tiene muchos vínculos a nivel internacional, especialmente en Bruselas. Hertoge se sorprendió del hecho de que la mitad de todos los parques infantiles estuvieran contaminados con al menos un pesticida y que la mayoría de las sustancias encontradas fueran hormonalmente activas. Según la legislación europea, estos parques son zonas sensibles y frecuentadas por muchas personas, no sólo por niños, sino también por pensionistas, jóvenes y mujeres embarazadas. “Esto puede ser muy peligroso para los niños y las mujeres embarazadas”, dice Hertoge.
Él espera que el estudio ponga algo en marcha a nivel nacional, ya que actualmente se está revisando el Plan de Acción Nacional sobre pesticidas; ahí también se regula las distancias de fumigación a las zonas sensibles. “Queremos llamar la atención sobre el hecho de que los campos de deportes y los patios de juego, los jardines de los hospitales y las residencias de ancianos o los patios de las escuelas hasta ahora no han estado suficientemente protegidos contra las toxinas agrícolas”.

Ulrich Veith, alcalde de Malles, también es optimista: “Estamos muy bien organizados en el Tirol del Sur. Tenemos excelentes proveedores de servicios en el sector agrícola. Podríamos dar los pasos necesarios para la agricultura orgánica, incluso mucho antes que otros”.

Shiva: “Deseo muchos Malles en el mundo”
Sin embargo, los 38 agricultores que interpusieron un recurso contra la Ordenanza de Pesticidas -según la cual ya no les era permitido aplicar pesticidas sintéticos a partir del 2018- siguen en desacuerdo. Por lo tanto, la prohibición ha sido suspendida temporalmente; desde la última fecha en enero, la municipalidad ha estado esperando el fallo. Mientras tanto, las fumigaciones pueden continuar.
El Tribunal de Cuentas de la Provincia Bolzano, que depende de la comisión gubernamental y, por tanto, del Ministerio del Interior italiano, había exigido casi 24.000 euros al alcalde de Malles. Ese fue el costo del referéndum que, según la autoridad, fue ilegal. Entonces, exigió dinero para un referéndum en el que participó el 70 por ciento de los votantes y en el que casi el 76 por ciento se pronunció a favor de la prohibición de los pesticidas.

Pero el alcalde no tenía que pagar: el Viernes Santo fue absuelto de todas las acusaciones. El referéndum fue legal. Y pocos días después llegó otra buena nota: Vandana Shiva, la activista agrícola de la India, viajó al norte de Italia. “Malles”, dijo Shiva, “es el mejor fertilizante para el coraje. Y este valor es una virtud muy rara en estos tiempos”. El público le aplaudió de pie a la referente sobre conservación de semillas. Shiva dio a la gente de Malles la esperanza de que, después de todo, están en el camino correcto. “Deseo muchos Malles en el mundo”, dijo Shiva. “Porque Malles no sólo lucha por sí mismo. Es importante como pionero para todo el planeta”. Aboga por un mundo libre de pesticidas para el año 2030, también por el tema del cambio climático. “Sólo nos quedan diez años para impulsar este proceso”.

Trabajando para que las futuras generaciones encuentren un ambiente más saludable: Martina Hellrigl y Koen Hertoge, junto con sus hijos en su jardín en Malles, Italia.                                                   FOTO: Katharina Hohenstein  


Martina Hellrigl es una de las personas que contribuyó para el referéndum de Malles. Ella fundó una iniciativa ciudadana llamada Hollawint, que en el dialecto de Vinschgau significa “cuidado”. Y fue esta iniciativa la que llevó a unificar muchas otras iniciativas ciudadanas. ¿Y qué pasa ahora? La arquitecta, casada con Koen Hertoge de PAN-Europa, dice: “los más afectados por los daños siguen siendo los agricultores orgánicos”.

La fuerza del aliento largo

Martina Hellrigl también es presidenta de la Cooperativa Agropecuaria vinterra. La instancia del control ecológico de la región le recomendó a vinterra sembrar las hortalizas de hoja solo en campos que no limitan con los frutícolas convencionales.
¿Cuánto tiempo llevará hasta que se haga efectiva la prohibición del uso de los pesticidas? Para ella es incierto. “Sin embargo, tengo esperanza cuando veo a un nuevo agricultor orgánico interesado en producir para la región o a la esposa de un campesino que reconoce que es mejor sembrar variedades en vez de monocultivos. Y cuando otro agricultor se une a nosotros cultivando melones, calabazas y frijoles en su tierra y ofreciéndolos en nuestros mercados, eso me da confianza”.

Texto: Katharina Hohenstein

Foto principal: Antes de la visita de Vandana Shiva en el Tirol del Sur, la referente sobre conservación de semillas, se juntó con Ulrich Veith, alcalde de Malles, en la cámara de Diputados en Roma. Fue por una conferencia de prensa con activistas y médicos del medioambiente. (desconocido)

Desde el Alemán: Romano Paganini